sábado, 5 de enero de 2008

Roxeta, esa mirada tuya me enternece.


Roxeta, esa mirada tuya me enternece, cuando te llamo para darte lo que mas te gusta, cariño, caricias e higos secos.
Hoy me has dejado fuera de juego, cuando te he dicho por primera vez "muy bien", y tu te has parado, me has mirado y te has venido a mi lado como un ser que entiende como una persona. Si me has sorprendido otra vez...
Desde que te ayude a venir a este mundo, saliendo de tu madre "Guapa", como quien entra en una tienda de juguetes, mirando todo a tu alrededor con sorpresa y atención, no me has dejado de sorprender, quizás crees que formo parte de tu familia ?. Lo digo porque solo eramos tres aquel día, tu madre tu y yo... Fue maravilloso ver como se producía tu venida sin problemas. Todo natural y precioso. Que sepas que espere dejando caer alguna lágrima (de emoción), hasta que te pusiste de pie tambaleándote y temblorosa, te acercaste a tu madre buscando debajo de su cuerpo, las tetas que te alimentarían durante casi un año. Por eso, te llamo mamona de vez en cuando. No lo sabias ?. Bueno, te alimentó de forma complementaria, ya que tu pesebre... bueno me callo, que si hablo, no tendré mas remedio que descubrir a todo el mundo, que eres una tragona. Así que Roxeta, eres muy guapa e inteligente, pero fuiste una mamona empedernida y ahora una tragona incorregible. Pero te quiero mucho y tu lo sabes, porque me lo dices con tus miradas, que me enternecen.

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